Navidad

Y de nuevo Navidad. Como cada año, miles de felicitaciones, luces, música y un sin fin de gente en todas partes. La verdad es que es inebitable evitarla, nunca mejor dicho, porque lo invade todo. En cada rincón, con cada niño, con cada sonrrisa.

Este año he pensado que me lo voy a tomar de manera diferente. Quiero disfrutarlo más, y aunque esté lejos de casa, sé que no estaré sola, y eso me reconforta y me hace feliz. Al fin y al cabo si uno quiere llevar a su familia la lleva en el corazón, y no importa lo lejos o cerca que ésta pueda estar, mientras que no nos olvidemos de ella. Quiero estar contenta por todas aquellas personas que aún sin tener nuestra suerte se toman la vida con la mejor de las sonrisas. Por todos los amigos y personas maravillosas que alguna vez se cruzaron en mi vida, sin querer o queriendo, y de las que no me olvido. Por todas aquellas personas que me acogieron con el mejor de sus cariños y me hicieron sentir una mas, y no una extranjera, y por supuesto, por la persona que día a día me demuestra lo mucho que me quiere y que desea verme feliz, feliz, feliz.

Cerca de aquella zona donde se unen los sentimientos y los deseos mas intimos, agarrándose con mas fuerza que mil huracanes, estáis todos vosotros. Parte legítima de mi "yo", vuestras raices perdurarán en mi cuerpo y en mi persona para siempre. Ojalá todo fuese mucho mas fácil, ojalá pudiera, con tan solo un chascar de dedos, poderos traer hasta mí. Pero no hay fuerza mas grande que la que es capaz de emociar al ser humano, de despertar en nosotros unos sentimientos de amor profundo y sincero.

Con esta fuerza voy a afrontar esta navidad, deseandoos a todos que penseis en ello, en la gente que tenemos cerca, en la suerte que tenemos de estar en esta parte del mundo, con nuestras quejas, insignificantes al lado de las de otras personas con verdaderas necesidades. Con las personas que queremos y con la familia, que, al fin y al cabo, son los que siempre nos tienden la primera mano cuando la necesitamos.